Headlines

La efectividad de biosignaturas en la búsqueda de vida extraterrestre

Los científicos están enfrentando crecientes dudas con respecto a la efectividad del enfoque de biosignaturas en la búsqueda de vida extraterrestre. En 2020, los investigadores detectaron un gas llamado fosfina en la atmósfera de un planeta rocoso de tamaño similar a la Tierra. La presencia de fosfina, que típicamente solo se produce a través de procesos biológicos, inicialmente generó emoción como posible señal de vida. Sin embargo, resultó ser Venus, y la afirmación de una posible biosignatura de fosfina en el cielo venusiano sigue siendo controvertida años después.

Los desafíos para determinar si los gases en las atmósferas de exoplanetas podrían proporcionar evidencia convincente de vida extraterrestre se están volviendo más evidentes. Recientes estudios han explorado las incertidumbres en torno a la detección de biosignaturas en exoplanetas. Los científicos se enfrentan al problema de las alternativas no concebidas, donde deben asegurarse de haber descartado toda posible explicación no biológica para la presencia de gases en planetas distantes.

La introducción del Telescopio Espacial James Webb (JWST) en 2021 ha aumentado las esperanzas para la detección de biosignaturas en exoplanetas. El JWST ya ha capturado datos sobre la composición atmosférica de un exoplaneta de tamaño medio conocido como K2-18 b, lo que ha llevado a interpretaciones controvertidas de posibles evidencias de vida. Sin embargo, los científicos ahora cuestionan abiertamente si los gases en las atmósferas de exoplanetas proporcionarán alguna vez evidencia definitiva de vida extraterrestre.

Uno de los principales desafíos involucra el cálculo de la probabilidad de que exista vida basado en la presencia de posibles gases biosignatura. El Teorema de Bayes se utiliza a menudo para determinar esta probabilidad, teniendo en cuenta la biología del planeta y la probabilidad de que la vida produzca biosignaturas observables. Sin embargo, la existencia de planetas sin vida que podrían dar lugar a señales similares plantea un desafío significativo a este cálculo.

La imprevisibilidad de las alternativas abióticas presenta un obstáculo sustancial para la identificación de biosignaturas confiables. Por ejemplo, cuando los investigadores descubrieron sulfuro de dimetilo (DMS) en la atmósfera de K2-18 b, algunos lo interpretaron como evidencia de un mundo acuático con una superficie habitable, mientras que otros lo vieron como evidencia de un planeta gaseoso inhóspito similar a Neptuno.

Los hallazgos recientes en Venus y la Tierra han remodelado la comprensión de los científicos sobre las posibles biosignaturas. La emoción inicial por la detección de fosfina en Venus se vio atenuada por la realización de que el gas podría ser producido abióticamente a través de la actividad volcánica. De manera similar, la presencia de oxígeno, antes considerado un gas de biosignatura, ha sido reevaluado a medida que los investigadores descubren fuentes abióticas de su producción en planetas rocosos.

A pesar de los desafíos y las incertidumbres, los investigadores siguen comprometidos en avanzar en nuestra comprensión de la vida extraterrestre. La controversia en torno a las biosignaturas ha impulsado nuevos esfuerzos para explorar fuentes no convencionales de gases en nuestro sistema solar y más allá. A medida que se planean misiones a Venus en las próximas décadas, los científicos tienen la esperanza de que estas empresas arrojen luz sobre los misterios de nuestros planetas vecinos.

En el campo en constante evolución de la astrobiología, la búsqueda de vida alienígena sigue siendo un esfuerzo tentador que empuja los límites del conocimiento científico. Aunque el camino por delante puede estar lleno de desafíos e incertidumbres, los científicos están decididos a continuar su búsqueda de respuestas sobre la existencia de vida más allá de la Tierra.

Fuente: https://www.quantamagazine.org/doubts-grow-about-the-biosignature-approach-to-alien-hunting-20240319/